Pensando en compartir los modos y maneras culinarias a la hora de hacer una barbacoa, un asado como habitualmente se hace en Argentina, presento este espacio.
No sólo es el tiempo de cocinar la carne; es inducir a quienes lo disfrutan y saborean a que pasen un grato momento. La comida no deja de ser una excusa para juntarnos, aunque está claro que tiene que estar bien. Las 4 o 5 horas que se pueden usar para cocinar un cordero permiten a los invitados a que se relacionen y aprovechen de un bien muy escaso en estos años: el tiempo.
Desde costillas de ternera, butifarras, cerdo y pollo; incluyendo patatas, berenjenas, cebollas y pimientos rojos, hasta llegar al cordero que se cuece en una cruz, poquito a poco, al calor de las llamas.
Unos vinos reconocidos en el país, provenientes de Mendoza o San Juan; unas empanadas caseras de carne, cebolla, huevo, pimiento y aceituna, y un postre dulce para cambiar radicalmente todo lo anterior y acompañar perfectamente al café: alfajores de maizena.
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